manifiesto_presentación


Cultura de Base es una plataforma generada por diferentes agentes culturales y sociales de Barcelona que funciona como punto de encuentro para el análisis y la reflexión sobre las políticas culturales y las repercusiones que éstas han tenido durante los últimos años. El principal punto en común entre las personas, colectivos y agentes que participan en esta plataforma abierta se centra en la puesta en crisis del modelo de política cultural de Barcelona que desde hace ya varios años azota este contexto.

 

Durante los últimos años, hemos padecido una falsa política de la consulta y participación que esconde una falta total de complicidad entre las y los agentes sociales y culturales con las administraciones públicas y los centros de toma de decisión político-cultural y, en consecuencia, con el devenir de nuestra ciudad. Esta desconexión ha tenido terribles consecuencias como pueden ser: la desaparición progresiva de espacios independientes; el cierre de centenares de espacios de creación (estudios, talleres, locales de ensayo, etc.) en especial en el Poblenou (22@); el oscuro proceso de cambio de orientación del Centre d’Art Santa Mónica; el uso con fines políticos de los programas de gran parte de las instituciones culturales; el programa "fabriques per la creació" puesto en marcha sin comprender la realidad cultural de la ciudad; la criminalización de ciertas prácticas culturales relacionadas con el espacio público y otros muchos conflictos todavía abiertos.

  

La falta de transparencia en la orquestación política y la toma de decisiones a espaldas de los agentes culturales, asociaciones de vecinos y colectivos independientes responde a un modelo basado en la instrumentalización de la cultura para fines políticos y económicos que tan solo simula el diálogo con el grueso social partiendo de negociaciones lastradas por políticas de hechos consumados. Todo esto ha conducido a una situación de extrema frustración y hastío por parte de los agentes culturales y sociales quienes hemos sido relegados de nuestro papel como interlocutores y padecemos las consecuencias de un modelo que parece no existir, que es fruto de la contingencia y que se diseña por la suma de decisiones cortoplacistas y que, en consecuencia, está falto de un proyecto real y visible.

  

Pensamos también que esta situación es en parte consecuencia de nuestra incapacidad como productores culturales para generar formas de comunicación y reflexión que escapen de las disciplinas de trabajo más inmediatas y que ha dividido las reivindicaciones que resultarían más efectivas y beneficiosas para la ciudad vincularan entre ellas en vez de mantenerse en un estéril aïslamiento sectorial. Hay que ser concientes que no hemos sabido comunicar a la ciudadanía la importancia de los hechos acontecidos y como estos afectan no sólo a la gente que trabajamos en cultura o a los/as afectadas de forma directa en cada conflicto sino a todo el grueso de la sociedad civil.

 

Por todas estas razones creemos necesario establecer Cultura de Base para mostrar de forma colectiva la posición a todos estos hechos y trabajar conjuntamente para plantar cara a los desmanes de la clase político-cultural de la ciudad. Esta plataforma buscará en todo momento sumar e incluir las reivindicaciones ya existentes y las formas de resistencia ya establecidas por parte de los agentes, colectivos y espacios independientes de la ciudad. De esta manera trabajará de forma activa para entender todas sus necesidades con el objetivo de construir un frente de denuncia común a la situación que padecemos y que marca nuestro presente cultural. 

 

Creemos que centrándonos en estos puntos en común y tomando la colectividad y el diálogo permanente como herramientas principales, podemos generar reflexiones y estrategias que impulsen acciones concretas que puedan ayudar a generar un panorama cultural más saludable y acorde a las necesidades reales de nuestro contexto.